sábado, 7 de mayo de 2011

LA ACEROLA, PURA VITAMINA C

La Acerola pertenece a la familia de las Malpighiaceae y tuvo su clasificación taxonómica recientemente cambiada para Malpighia emarginata DC.

Su origen proviene de las Antillas, más específicamente de Puerto Rico, y ha sido propagada por Sudamérica y está perfectamente adaptada al clima y suelo brasileño. Hoy, Brasil es el mayor productor, consumidor y exportador de acerola en el mundo.

Presenta, además de la vitamina C, otras vitaminas, como la tiamina, riboflavina, niacina, ácido pantoténico, vitamina B6 y vitamina A. Entre los minerales, se destacan el calcio, potasio, magnesio, fósforo y hierro.

Es una fruta delicada y difícil de ser transportada y manejada.

La acerola se destaca por presentar concentraciones entre 1.000 y 4.600 mg/100g de fruta, dependiendo del punto de maduración y lugar de cosecha. Esta cantidad de vitamina C es muy superior a la que presentan otras frutas tropicales.


Concentración de Vitamina C en algunas frutas:

  • el contenido de vitamina C disminuye a medida que la acerola va madurando
  • tiene una buena biodisponibilidad
La vitamina C es hidrosoluble, y entre sus características importantes están su inestabilidad al calor, a la luz y al oxígeno, y su rápida absorción y metabolización por nuestro organismo.

La acerola es hoy uno de los principales ingredientes en la industria de alimentos, que demuestra creciente interés por productos con buen equilibrio nutricional.

Están apareciendo nuevos productos que contienen acerola y sus derivados y, consecuentemente, aporte de vitamina C natural, están siendo lanzados, principalmente en el segmento de bebidas, como jugos, néctares, lácteos y suplementos alimenticios, y también en otras aplicaciones, como barras de cereales, productos de panadería, sopas, chocolates, caramelos, helados, postres, productos cárnicos y salsas.
La acerola, así como sus derivados, está siendo utilizada para aumentar la concentración de vitamina C natural en el producto final, para compensar pérdidas que ocurren en el procesamiento y almacenamiento y, además, para mejorar la calidad de los productos industrializados.