jueves, 30 de mayo de 2013

UNA FAMILIA EN ESPAÑA DE 4 MIEMBROS NECESITA 520 EUROS AL MES PARA COMER SALUDABLEMENTE

Una familia formada por padres y dos hijos necesita un mínimo de 520 € al mes para comer de forma saludable, según el decálogo con consejos e indicaciones para hacer una compra de alimentos equilibrada que han elaborado la Cruz Roja y la Generalitat de Catalunya.

En este documento se incluyen recetas equilibradas para comer bien, bueno y barato, cifrando en unos 22 euros lo que cuesta alimentar a un niño de 3 a 6 años a la semana, 30 euros cuando tienen de 7 a 12 años y 39 lo que necesita una persona a partir de los 12, lo que implica, en total, un gasto de entre 130 y 150 € semanales.
Al parecer, el presupuesto se ha hecho a partir de los precios de referencia de 8 establecimientos de alimentación durante el primer trimestre de 2013 y para escoger los productos se ha tenido en cuenta la pirámide alimentaria y las veces a la semana que hay que consumir determinados alimentos.
En una semana, una familia necesita 1 kilo de legumbres, arroz y pasta, medio de harina y azúcar, 250 gramos de pan tostado, entre 5 y 6 kilos de pan, 6 litros de leche, 24-30 yogures, 2 litros de aceite, 800 gramos de queso y 400 gramos de frutos secos.

Además, esa misma familia necesita para alimentarse saludablemente 14 kilos de fruta fresca, 10 kilos de hortalizas y verduras, 5-6 kilos de patatas, 2 de carne y pescado, 2 docenas de huevos, 400 gramos de embutido, un kilo de salsa de tomate, 200 gramos de chocolate y 250 gramos de mermelada y cereales. 

También se recomienda beber agua con las comidas, acompañar con pan los alimentos y utilizar aceite de oliva para aderezar y freír los alimentos.
Asimismo, se aconseja planificar la minuta para evitar compras compulsivas, buscar el mejor precio, evitar productos precocinados o diseñados para ahorrar tiempo en la cocina, preparar lo justo para comer cada día y evitar el despilfarro de comida, conservar bien los alimentos, controlar mucho el gasto si se come fuera de casa y evitar alimentos como golosinas, refrescos, bollería que contribuyen a aumentar las facturas pese a no ser alimentos básicos.
  
Ambas entidades han recordado que estamos ante una emergencia social por el contexto económico actual y que aumentan las personas en situación de vulnerabilidad.