lunes, 8 de marzo de 2010

LA REGULACIÓN DE UN GEN PUEDE ACABAR CON LA OBESIDAD

Investigadores del Instituto de Biotecnología Molecular de la Universidad de Viena (IMBA, por sus siglas en alemán) descubrieron un gen partícipe en la formación del tejido adiposo y cuya regulación puede ayudar a acabar con la obesidad.

El tejido adiposo está compuesto por grasa multilocular de células “marrones”, que utilizan las grasas de los alimentos para producir calor, y por grasa unilocular con células “blancas”, que las transforman en más grasa y cuya acumulación favorece la obesidad.

Aunque hasta el momento todos los tratamientos reguladores de grasa afectaban a ambos tejidos, estos expertos analizaron en ratones más de 500 genes que intervienen en el metabolismo de las grasas y detectaron que el gen “hedgehog” –presente en el desarrollo de muchos animales, desde la mosca al ser humano– reduce “específicamente la grasa blanca”.

Para comprobar esto, desactivaron en ratones otro gen, el “sufu”, que a su vez frena el “hedgehog”, observando que los ratones que no tenían tejido adiposo blanco crecieron “flacos” pero “completamente sanos” dado que “las células de grasa marrones se habían desarrollado de forma mortal”.

Estos resultados pueden contribuir decisivamente al desarrollo de un medicamento para personas con sobrepeso u obesas sin necesidad de producir ninguna modificación genética, lo que supondría “toda una revolución” al poder convertir la energía contenida en los alimentos sólo en calor corporal en lugar de depósitos de grasa.